martes, 29 de marzo de 2011

Y tú, cómo comes?

Comer, necesitamos comer todos. Está claro que si no lo hacemos, ya sabemos el final. Sin embargo, hoy pensaba en mi menú y he llegado a la conclusión que existen 4 maneras de comer. Y no significa que una se decante por una o por otra: en mi caso, dependiendo del día y del momento utilizo una u otra fórmula:

- Comer, para alimentarse
- Comer, por placer
- Comer, por salud
- Comer para no engordar.

O no?
En mi caso, lo que comer por alimentarse se da pocas veces. Tengo que reconocer que me encanta comer y ese patrón de "obligación" no lo tengo muy presente en mi "disco duro".

Comer por placer, sin duda sería uno de mis argumentos. Desgraciadamente, no lo puedo aplicar diariamente. Ni por tiempo (ese oro tan preciado!) ni por cuerpo (mis curvas no se lo pueden permitir, la verdad.). Así, que reservo esa parcela para los viernes y sábados por la noche. Un pequeño regalo a mi paladar y, la verdad, a mi espíritu. Entiendo que esta tendencia está muy presente en la cabeza de los "marketenianos" del sector de la alimentación. Nuevas propuestas, interesantes ingredientes y texturas. Quién se resiste a probarlo?

Comer por salud, es quizás lo que intento hacer durante la semana y, eso sí, al mediodía especialmente. Me organizo (mentalmente) un menú que después materializo con la compra de el mismo en algún establecimiento. Busco variedad, analizo sus componentes (vitaminas, proteínas, etc) y lo tomo. No hay un placer intrínseco. Me gustan las lentejas y las disfruto, pero no existe el componente "exquisite luxe" para mi. Más bien lo reorientaría hacia un "home made " trend, aunque en mi caso, como lo compro, ni siquiera eso. Pero en fin, intento que pueda ser racionalmente variado. Supongo que tampoco soy tan rara: cuantos productos "healty" se han lanzado en los últimos tiempos? Una barbaridad. Probablemente, y junto con el universo "premium luxe" son las dos grandes tendencias.

Comer para no engordar, que supongo que será el tema más mayoritario. Lo reservo principalmente para las cenas. El típico "ligerito" que intento llevar a cabo de lunes a jueves y el domingo. Nada pesado y sobre todo, evitar las carnes por la noche. Ya lo decia aquel: desayuna como rey, come como príncipe y cena como mendigo. Pues algo así.

Aquí no hay secreto y esto no es una guía de "como vivir sin engordar". Ni mucho menos.

Lo que sí que hay es una ámplia gama de grises en un acto que hacemos diariamente, al menos 4 veces al día. Nunca me había parado a analizarlo de esta forma. Pensaba en "ahora estoy a dieta" y solo puedo comer esto y aquello y de tal manera, o "ahora no estoy a dieta " y puedo comer todo lo que me apetezca. Pero en realidad no es así. No hay un blanco o un negro. El día a día me lleva a buscar un equilibrio también en este sentido y realizo todo este análisis mental, casi sin darme cuenta , para llegar a una punto final: ALIMENTARME.
Increíble, no? 

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