viernes, 8 de julio de 2011

Una de cuidado: La CURVA de la FELICIDAD

Todos hemos oído mil veces eso de la curva de la Felicidad. Ese maravilloso "bultito" que asoma en nuestro estómago y que da fe de los buenos ratos vividos solos o "en compañia de otros", disfrutando de un buen ágape y alguna cervecita de más.

Ahora que todo el mundo está inmerso en esa temida "operación bikini" yo me pregunto si realmente es válido o no el esfuerzo por lucir un cuerpo bello y esbelto donde se aprecie un rigor estricto en las comidas y un territorio inmaculado de ausencia de "extra calorias".

Veamos, no se trata de hacer de este post una oda a la caloría absurda, ni mucho menos. Sin embargo, con el tiempo empiezo a valorar más mis pequeños placeres y sus consecuencias y no tanto esos 5 kilos que siempre andan arriba y abajo y que tanto cuestan de controlar.

Si la curva habla de felicidad y a este mundo venimos 4 días... debo estar luchando 3 para lucir quizás bien 1/2 día y el resto Dios dirá??!!.



enforofemenino.com

Pues creo que no. Que ha llegado un momento en mi vida en el que mis curvas valen su peso , no sé si en oro, pero sí en felicidad. Porque demuestran vida, alegria y no sé si mucho humor pero al menos buenos ratos. Aquellos que me certifican  que son la razón de mis seres más queridos. Aquellos que he compartido con la gente que adoro y los que me niego a renunciar. Da igual si es al frente de una paellita con su cervecita, o con un cafetito y , por qué no! y un dulce que lo acompañe.

Esos pequeños placeres que hacen que esos cuatro días tengan una ecuación distinta: 3 me los paso viviendo y disfrutando y quizás 1/2 renegando del dulce pastelito de chocolate con tofee que anoche me tomé... (Restaurante Ohla tapas. Via Layetana, BArcelona. Genial!). El 1/2 lo dejo para el resto que no puedo controlar, no?

Insisto, sano sí. Aséptico, ya no.

Seguiré con mis momentos "cuál es la última dieta milagro?", pero no me perderé el placer de combinar la salud física con la salud mental. Y si eso incluye la cañita con su tapita... pues aleluya!


Emociones dietéticas
Señales de vida
Momentos compartidos

1 comentario:

  1. Me ha encantado el post! =)
    Yo entiendo bien del tema porque vengo de un pais dónde ser gordo es casi peor, sino peor, que tener una enfermedad grave. Los brasileños son CRUELES con las mujeres.. la presión social es absurda. Siempre que vuelvo a mi pais me sorprendo con la cultura del culto al cuerpo. Yo no tengo paciencia para todo eso. A mi me parece genial la preocupación en comer de forma más sana y de tener tantas opciones orgánicas y low fat, pero se están cambiando los valores de la gente. La belleza estética ha ganado un peso que para mi es totalmente "over rated". Yo me preocupo con mi peso, claro, pero no me privo de comer nada. Comer para mi es un verdadero prazer! Y tú lo has dicho muy bien: me perderé el placer de combinar la salud física con la salud mental. Vamos por un café + chocolate, Berlia? =)

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